Dexpertando

“El conocimiento es poder”, venía a decir el filósofo Francis Bacon hace unos 400 años. Sin entrar en detalles del significado original de esta cita (podríamos reflexionar mucho sobre qué es conocimiento y qué es poder, por ejemplo) creo que todas y todos hemos escuchado esta frase alguna vez y, quien más quien menos, sabemos a qué se refiere. Una persona con una cierta “sabiduría” en una temática concreta tendrá unas herramientas que otras no tendrán para entender, reflexionar, e interactuar en ese ámbito. Tendrá, por tanto, un cierto poder de transformación. Se crea así una élite de personas “expertas” que deciden por las demás. Al fin y al cabo son “las que saben” y por tanto, tomarán las “mejores” decisiones. Esto puede parecer obvio e incluso lógico. No es de extrañar: la “cultura del experto” nos invade constantemente, siendo asumida incluso por aquellas personas que se hacen llamar progresistas. No obstante, a mi juicio, este enfoque “despótico” del saber para elitizar la toma de decisiones choca frontalmente con una democratización del poder. Intento explicarme con un ejemplo cercano:

Rebelándonos contra el sistema (capitalista) III: La Escuela

Que en España hay un problema educativo es algo que parece ampliamente aceptado por todas y todos. No parece tan claro, sin embargo, ni las causas de esta realidad ni, por supuesto, las posibles soluciones. Se suele justificar argumentando que cada vez que PSOE (¿aún izquierda para algunas y algunos?) o PP (derecha) se han alternado en el gobierno han traído “bajo el brazo” una nueva ley educativa, lo que ha dificultado la consolidación de ningún modelo. Ahora aparece la LOMCE (conocida como “Ley Wert”), normativa particularmente competitiva y clasista, y gran parte de la ciudadanía considera este episodio uno más de la alternancia anteriormente señalada. No obstante, actualmente nos encontramos ante un momento histórico de empoderamiento ciudadano que nos debería invitar a implicarnos en lo público, a participar en política y, por tanto, que debería también obligarnos a mirar “el problema” educativo con nuevos ojos. ¿Hemos reflexionado lo suficiente sobre para qué van nuestras niñas y niños a las escuelas?, ¿qué tipo de ciudadanía queremos? y en consecuencia, ¿qué escuela necesitamos para ello?

Syriza y Podemos: ¿cómo queremos el cambio?

En ciertos medios que nos tienen acostumbrados a un nivel periodístico de trabajo de instituto, se ha anunciado la noticia acerca del adelanto electoral griego con la coletilla “Syriza es el Podemos griego”, por un paralelismo entre las dos fuerzas basado principalmente en un vertiginoso aumento de los votos, mal pronosticado por el régimen. Un ejemplo, el titular elegido en esta noticia del ABC.

Rebelándonos contra el sistema (capitalista) II: CONSUMISMO

Yo me considero un consumista brutal. Mi familia me dice que no, que guardo ropa en los armarios desde hace años, que nunca tiro nada, y que controlo bastante lo que voy comprando por ahí. Pero sólo hace falta echar un vistazo a mi casa para ver la cantidad de cosas que una vez compre, y que en realidad ni necesito, ni hacen que mi vida sea más feliz.

Rebelándonos contra el sistema (capitalista) I: MUFACE

Vivimos un tiempo de catarsis colectiva. Cada día nos despertamos con un caso nuevo de corrupción, con una nueva indignación mañanera. Nos estamos dando cuenta claramente de las complicidades que ha habido durante todos estos años entre el poder económico y muchxs (no todxs) de nuestrxs representantes políticos, lxs cuales, en vez de velar por los intereses de la mayoría social, han aprovechado su situación para enriquecerse. Y nos duele porque nos sentimos engañadxs y utilizadxs.

La lotería, la solidaridad y la publicidad

Antes de ver el anuncio de la lotería de Navidad de este año, había recibido por Whatsapp 12 “memes” sobre el anuncio. He metido en Google “lotería de navidad anuncio 2014” (así de crípticas son mis búsquedas, amigos), y veo noticias sobre una polémica laboral en torno a la realización del anuncio, sesudos análisis sobre las técnicas de marketing utilizadas, más noticias: una falta de ortografía que han encontrado en el anuncio, y por supuesto, las parodias. Al fin me he decidido a verlo.

¿Confluencia? Así la entiendo yo

Últimamente es bastante habitual discutir sobre una posible confluencia de las organizaciones político-sociales (al margen de PP y PSOE) de cara a las próximas citas electorales. Yo he participado con amigas y amigos en algunas de estas discusiones, en persona y en redes sociales, y algunas veces, tras bastante tiempo de charla, he tenido la sensación de que no todo el mundo tiene la misma idea de lo que significan términos como confluencia o convergencia. De ahí que me haya animado a compartir en estas líneas mi opinión al respecto.

Nos presentamos

¿Otro blog de política? ¿Por qué no? Quizás sólo contribuyamos con unas gotas al mar de opiniones vertidas por este medio, que permite gritar mucho y escuchar poco. O tal vez contribuyamos a que la cascada a la que nos dirigimos caiga más fuerte. Nos gustaría compartir en la web el resultado de debates que han surgido cuando, después de un largo día recorriendo la selva postmoderna, nos reunimos, muchas veces anonadados por las tremendas contradicciones que vemos, a compartir puntos de vista.